¿Alguna vez te has sentido tan desbordad@ que has pensado que nada valía la pena? ¿Te ha ocurrido alguna vez que te has visto teniendo ganas de desaparecer? ¿Tu hijo/a te ha verbalizado que tiene ganas de morirse? ¿Ha intentado suicidarse y no sabes qué hacer? ¿Algún alumno/a se autolesiona y no sabes cómo abordarlo en clase? ¿Necesitas herramientas para saber cómo ayudar en estos casos?
Prevención del suicidio
Hablar del suicido salva vidas, lo que mata es el silencio. Cecilia Borrás.
Existe una lacra social en pleno siglo XXI que se está llevando por delante a muchas personas, muchas de ellas a edades muy tempranas. Las últimas estadísticas arrojan datos escalofriantes y triplican en un año la tasa de mortalidad por suicidio en jóvenes menores de edad.
Cerrar los ojos a la realidad de lo que sucede en la sociedad no hará que las cifras desaparezcan. Tenemos que ayudar a visivilizar, a hablar de ello para que deje poco a poco de ser ese tabú que arranca vidas y del que nadie habla y podamos convertirnos en agentes de prevención del suicidio.
Para trabajar la prevención del suicidio es muy importante conocer los datos y las estadísticas que nos han llevado hasta al lugar que estamos. Eso arrojará luz acerca de la importancia de enfrentar esta problemática de manera directa y tajante.
Con datos es fácil observar que de la misma manera que haciendo campañas para disminuir los accidentes de tráfico o la violencia de género, se han conseguido resultados increíbles, también habría que hacerlo con la prevención del suicidio en aras de empezar a frenar la oleada sin freno que estamos viviendo a nivel social.
De hecho 7 de cada 10 muertes violentas de mujeres en el mundo , incluidas las guerras, son causadas por el suicidio.
Por cada suicidio consumado, se producen entre 100 y 200 intentos de suicidio en la adolescencia. Y en muchas ocasiones el desconocimiento y el miedo por parte de las familias acerca de lo que es mejor hacer en esos casos hacen que se le quite importancia, tildando las conductas de simples «llamadas de atención».
«La ideación suicida es algo común y comprensible ante determinadas circunstancias en la vida».
Eduko
La prevención del suicidio empieza por desmitificar todos esos mitos que hay acerca del suicidio que nos han llevado a tanto silencio y tabúes.
La mayoría de las personas que se suicidan están luchando con problemas emocionales y psicológicos que pueden parecer abrumadores y aterradores, y a menudo sienten que no tienen a nadie a quien acudir o con quien hablar. Al hablar del suicidio, podemos eliminar el estigma y el tabú que rodea a este tema y permitir que las personas se sientan más cómodas para hablar sobre sus problemas y buscar ayuda, convirtiéndonos de esa manera en agentes de prevención del suicidio.
Además, hablar sobre el suicidio puede ayudar a prevenir futuros suicidios. Si alguien tiene pensamientos suicidas, saber que hay recursos y ayuda disponibles puede ser una fuente importante de esperanza. También puede permitir que las personas identifiquen signos de advertencia y brinden apoyo a quienes están enfrentándose a ello en su vida.
Por el contrario, el silencio puede ser peligroso cuando se trata de suicidio. Si no hablamos sobre ello, las personas que están pasando por ello pueden sentir que no tienen una salida y que no hay nadie que pueda entender lo que están pasando. El silencio además perpetúa el estigma y el tabú en torno al suicidio, lo que puede disuadir a las personas de buscar ayuda.
Eduko
Descubriremos cómo acompañar con herramientas de gestión emocional
Para entender cómo podemos, todas las personas, ser agentes de prevención del suicidio, es importante que tras conocer la realidad y deconstruir los mitos, tras hablar de lo que sucede dentro de un ser humano cuando llega a esos extremos, hablemos de por qué nos resulta tan incómodo el dolor ajeno y por qué solemos tratar de evitarlo.
Hablaremos del dolor, la tristeza y la muerte.
Hablaremos del "Efecto Werther" y el "Efecto papageno" y de cómo sí enfocar la prevención del suicidio y qué no decir o hacer nunca ante esas situaciones.
Hablaremos de las herramientas que nos pueden ayudar a prevenir el suicidio desde el autoconocimiento y la gestión emocional, y sobre todo cómo poder acompañar cuando creemos que alguien puede estar pasando por ello y ayudarle a generar un espacio seguro donde verbalizarlo y poder recibir ayuda.
¿A quién va
dirigido?
Este taller está orientado para cualquier persona que quiera ser agente de prevención del suicidio. Lo realizamos para adolescentes en institutos y centros educativos, para docentes en formaciones, para familias en AMPAS, educadores...
Beneficios
Arrojar datos y realidad a una problemática social que nos está desbordando. Romper mitos y poder hablar del suicidio desde su prevención. Entender cómo podemos ayudar y ser agentes de prevención del suicidio y generar esos espacios seguros donde otras personas puedan dar el primer paso y apoyarse para pedir ayuda.
Trabajamos en colaboración con la ONG La Niña amarilla en la prevención del suicidio.